domingo, febrero 05, 2006

Peter intentó ponerse las mallas. Le fue del todo imposible. Tenía demasiada barriga para abrocharlas doce años después. Campanilla se reía por no llorar.
Sic transit gloria mundi .

2 Comments:

Blogger Quique said...

He tenido que tirar de google para el latinajo.

9:15 p. m.  
Blogger sulaco said...

Seguro que esos kilos también los ganó en felicidad, en borracheras, en comilonas y en revolcones mientras la campanilla sigue esperando que le den el campanazo o le toquen el campanario.

11:01 p. m.  

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